Desde que se puso en marcha el proyecto de cooperación se ha dedicado especial atención a las niñas y mujeres dado que el rol tradicional que tienen asignado las mantiene relegadas al ámbito familiar, dedicadas al cuidado de los hijos y a realizar tareas agrícolas y ganaderas.

Desde que se puso en marcha el proyecto de cooperación se ha dedicado especial atención a las niñas y mujeres dado que el rol tradicional que tienen asignado las mantiene relegadas al ámbito familiar, dedicadas al cuidado de los hijos y a realizar tareas agrícolas y ganaderas.

Las acciones llevadas a cabo con este fin han sido las siguientes:

Becas. Se ha comentado a las familias la necesidad de que sus hijas asistan a la escuela y se formen. En esta línea se impulsa que la educación de las niñas no se limite a los primeros estudios sino que puedan continuar su formación fuera de Hushé, gracias al programa de becas. Estos esfuerzos han dado sus frutos y actualmente hay chicas que ya han finalizado sus estudios universitarios.

Salud. Desde el ámbito de la salud, los diferentes equipos médicos han dedicado especial atención a los temas relacionados con la salud de las mujeres y la maternidad. Desarrollando formación destinada a su higiene íntima, el cuidado de los hijos en temas como alimentación e higiene y haciendo hincapié en el embarazo, parto y posparto.

Educación emocional. Se ha iniciado un proyecto de educación emocional dirigido a chicas jóvenes para trabajar las emociones y comprender el papel que juegan en el desarrollo personal y en la convivencia. Esta iniciativa permite crear espacios donde las jovenes expresen y puedan ser escuchadas sus necesidades y aspiraciones como personas con capacidad para ser dueñas de sus propias vidas.

Educación de adultas. El proyecto de educación se ha visto ampliado ante la inquietud de las mujeres, muchas de ellas madres con hijos e hijas en edad escolar, que han manifestado su interés por aprender a leer y a escribir. Las clases se realizan durante los meses de invierno cuando decaen sus tareas de pastoreo y trabajo en el campo. Además se genera un espacio en el que se relacionan y empoderan en una sociedad en la que la posición de la mujer juega un papel secundario.

Chicas en la cumbre. Este proyecto se inició en 2018 con tres chicas de Hushé. En 2019 se consolidó. El objetivo es conseguir que mujeres, nietas e hijas de porteadores de la zona, tengan la opción de llegar a ser escaladoras, guías de montaña o dirigir su propia empresa. El inspirador del proyecto fue Abdul Karim, uno de los más emblemáticos porteadores del Karakorum. Dirige y coordina el proyecto Sebastián Álvaro. Hasta el momento se han realizado varias ascensiones a montañas de más de 5.000 metros y han hecho una expedición al Glaciar del Baltoro. En estas actividades además de la ascensión reciben formación. Cada nueva cumbre es inspiración y ejemplo para las chicas del valle de Hushé.