La pandemia ha obligado a que la Fundación Sarabastall no haya podido llevar a cabo su viaje anual al Valle de Hushé en Pakistán. Entre los meses de julio y agosto, un equipo de voluntarios se desplazaba hasta la zona para llevar a cabo tareas de seguimiento de los proyectos de cooperación y continuar con la formación de maestros y sanitarios.
No obstante el compromiso de la Fundación ha sido más intenso si cabe, manteniendo una comunicación constante con los socios locales para saber cómo estaba afectando este virus a la salud de los habitantes del valle. Es destacable que la incidencia de la enfermedad no ha sido severa en la zona, ni en el número de afectados ni en la gravedad de los casos. Sin embargo hay otro problema, la cancelación de expediciones a grandes montañas y la paralización del turismo, deja al valle de Hushé sin una de sus principales fuentes de ingresos, ya que buena parte de los hombres trabajan como porteadores. Esto va a ser la causa de un empobrecimiento de las familias que las pondrá en dificultades para afrontar el futuro próximo.
La Fundación acordó dotar de un fondo Covid para poder cubrir las necesidades básicas, comida y medicinas, de las personas más desfavorecidas del Valle de Hushé.
Compartimos con vosotros las imágenes de uno de los repartos de alimentos básicos que se han iniciado, así como de las tareas de desinfección en el Refugio Hotel. En ellas podemos constatar su capacidad de organización y trabajo por el bien común.
Desde aquí queremos agradecer a todas las personas, socios y colaboradores que seguís confiando en la Fundación Sarabastall.